
Como ya mencioné varias veces, trabajar en infografía, en un diario importante, en época de un Mundial de Fútbol es muy gratificante.
Por ser estas de las primeras infografías que hago, y que se publican ocupando un importante espacio en un suplemento mundialista, no puede dejar de sentir una gran satisfacción cuando veo el diario, y el suple en manos de la gente, en el colectivo, o en los bares.
Cuando no me toca trabajar por las tardes tengo la costumbre de tomar un cafecito en algún bar hasta que mi novia sale del trabajo y así volver juntos, y hace unos días cuando estaba en medio de mi rutina, sentí una gran alegría al ver como un par de mesas más allá, un grupo de señores que rondaban los 50 años, discutían, recordaban y entablaban una amena y entretenida discusión a medida que leían sobre los equipos y jugadores que aparecían en las infografías. Debo admitir que se siente una “satisfacción” muy grande, es como si uno, aparte de diseñar una infografía, hubiese diseñado una charla de café entre amigos.
En las infos “históricas”, por ejemplo, hay algunos cambios con respecto a la primera, y habrá cambios más notorios en las que van a venir, siempre para bien, siempre por escuchar al resto del grupo, a Pablo que me tiras algunas ideas y me deja desarrollarlas con total libertad y a los más técnicos y “cómicos” aportes de José que ayudan a que todo salga bastante mejor.
Todo para que lo diseñado no muera en el papel, sino que pueda influir de alguna manera en la conducta de los demás, aunque más no sea una acalorada charla de café.



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